“Solo le pido a Dios que el crimen y la corrupción no me sean indiferentes, es un monstruo grande y pisa fuerte sobre toda la inocencia de la gente. Soy un hombre de fe y usted no me es indiferente, doctor García, porque usted encarna la impunidad, porque usted ha pervertido los valores del Perú”. Con esta frase, aprendida de memoria, el candidato del Frente Esperanza, Fernando Olivera, empezó el duelo, cara a cara, con el líder de Alianza Popular, Alan García.
Asimismo, el aspirante de la escoba le recordó al expresidente que tiene que responder ante la justicia por los escandalosos casos de corrupción en su primer gobierno (1985-1990), así como por el enriquecimiento ilícito, los aviones Mirage, el Banco Internacional de Crédito y Comercio (BCCI), el departamento de París (Francia), el dólar MUC, la fundación Rayons de Soleil, el caso ‘Lava Jato’ y las coimas de Odebrecht. “(También debe responder por) las coimas del Tren Eléctrico, por el empresario Sergio Siragusa y la cuentas de Gran Caimán, por los crímenes como la masacre de los penales y el comando Rodrigo Franco”, remató. García, por su parte, solo le trajo a la memoria a Olivera el episodio de las conocidas cartas apócrifas. De hecho, fue el emparejamiento que más atención generó en la teleaudiencia.