Sábado, 30 Junio 2012
Desde la increíble noche del italiano Mario Balotelli hasta la frustración de Cristiano Ronaldo por no llegar a la final.
JEAN CARLO CASTRO
Redacción Online
La penúltima etapa de la Eurocopa nos dejó con una gran satisfacción a todos, y no porque España e Italia hayan pasado a la final, sino por el buen fútbol que nos dejaron ambos encuentros. Si Portugal y Alemania quedaron eliminados, fue por encontrarse ante dos selecciones en un nivel superior.
LO MEJOR
Mario Balotelli: una verdadera bomba. El delantero italiano explotó ante los alemanes. Hizo dos golazos y llevó a su selección a la final de la Eurocopa. Lo que más llamó la atención en él fue como gritó sus anotaciones. Y a pesar que tuvo una semana dura tras que se burlaron de su color.
Andrea Pirlo: el cerebro. Tuvo las ideas claras durante el encuentro. Elaboró cada jugada con rapidez y exactitud. Su toque sutil dejó, en más de una ocasión, tirando cintura a los alemanes. Un verdadero volante el 21 de Italia.
Gianluigi Buffon: rumbo a ser el arquero de la Euro. El guardameta tapó de todo ante Alemania. Fue una verdadera muralla italiana. La confianza que transmite a su selección desde el arco es única. A pesar de sus 34 años, el uno ‘azzurri’ es más ágil que un chiquillo de 20.
Sergio Ramos: tremenda calidad. Muchos lo mataron por el penal que falló en la semifinal de la Champions ante el Bayern Múnich, en el que mandó su disparo a las nubes. Sin embargo, en esta ocasión, ante Portugal se llenó de personalidad y picó el balón en la definición por penales. Gran gesto técnico del defensa, algo poco usual de ver.
San Iker Casillas. Es un santo en España. Es el jugador de las manos milagrosas. El guardameta tapó uno de los penales que ejecutaron los portugueses y se llevó el rótulo de ‘El salvador’. El arquero solo recibió un gol, en partidos, en lo que va de la Eurocopa.
Italia y el ‘jogo bonito’. La ‘azzuri’ nos acostumbró al juego físico y táctico. Pero en esta Eurocopa le ha agregado el buen toque, la pausa y la eficacia a la hora de definir los partidos. Ahora se enfrenta a España, selección que realiza un juego casi perfecto.
Fábregas: el psíquico. Cuentan sus compañeros de la selección que todo lo que predijo e intuyó en la Euro se hizo realidad. En la tanda de penales ante el equipo luso le cambió los planes a Vicente del Bosque y pateó el último tiro que le pertenecía a Iniesta. El resultado: España está en la final.
Pepe: el impasable. El defensa de Portugal tuvo un buen desempeño en la competencia. Fue un hueso duro de roer en la saga lusa. El central del Real Madrid estropeó cuanto ataque rival quiso dañar su arco. Si tan solo se olvidara de lastimar cuando defiende, sería uno de los mejores en su puesto.
Mesut Ozil, el rescatable de Alemania. Fue el jugador que más intento ante Italia. Nunca se cansó de desbordar por las bandas, lástima que despertó tarde el mediocampista del Real Madrid.
LO PEOR
Cristiano Ronaldo: una estrella sin brillo. Estuvo frustrado ante España los 120 minutos que duró el encuentro. Cuando tuvo el balón trató de hacer la individual, pero casi siempre sin éxito. Las pocas situaciones de gol que se le presentaron, las desperdició mandando sus disparos a la tribuna. Encima nunca pateó su penal a causa de que eliminaron a su selección antes que lo haga.
Xavi Alonso: salvado de la ahorca. El volante español, el primero en patear los penales de su selección, falló en el primer tiro de los doce pasos. La cara de Del Bosque y sus compañeros mostraron sorpresa, ya que el ´Leñador’ nunca falla.
Bastian Schweinsteiger: irreconocible. Fue el mejor volante de Alemania en la primer fase de la Eurocopa. Sin embargo, desde los partidos definitorios bajó su nivel. Al parecer la lesión que arrastra desde febrero le pasó factura en su rendimiento.
Mats Hummels: una puerta abierta. El defensor germano nunca pudo con Mario Balotelli, quien lo tuvo loco de un lado a otro. El central se mostró lento y tronco a la hora de marcar a los delanteros italianos. En el primer gol tuvo culpa, nunca anticipó al ‘Nene’.
Bruno Alves: el abusivo. Mandó su disparo al travesaño en la definición por penales. Portugal iba empatando, ya que Moutinho, su compañero, y Xavi Alonso habían errado. El luso prácticamente ayudo en la eliminación de su país.
Joachim Löw: confundido. Planteó mal el compromiso ante Italia. Él mismo lo reconoció en la conferencia de prensa después de la derrota. Mandó a Bastian Schweinsteiger, quien estaba lesionad, al campo de juego y se apuró en los cambios. Igual el alemán seguirá a cargo de su selección.
Nani: el individualista. Si Ronaldo estuvo fatal, Nani fue el peor. Al portugués no le salió nada. Estuvo solo, a veces deambulando, por las bandas. No fue el extremo del Manchester United que desborda y casi siempre asiste a un compañero, dejándolo solo de cara al gol.
